Monitorización en la nube; algunas cosas que deberías saber

La migración a la nube ha traído muchos cambios respecto a la operación en grandes entornos, pero la mayoría de las personas con capacidad de decisión todavía no han tenido tiempo de definir estrategias claras. La responsabilidad de mantener el 99,999% en sus SLAs sigue siendo la misma, tengan la operación en la nube, en un hosting o en su propio centro de datos. Los problemas siguen siendo los mismos: caídas, degradación de rendimiento y problemas de seguridad, solo que mucho más complejos.

Muchas de las herramientas de monitorización que han servido durante la última década no son capaces de enfrentarse a retos donde los entornos híbridos necesitan de una mayor flexibilidad y rapidez a la hora de enfrentarse a los cambios.

Debido a que somos conscientes de que muchas empresas están migrando a la nube sin tener en cuenta ciertos aspectos básicos y necesarios de evaluar, hemos decidido escribir este artículo. Aquí os daremos una visión general sobre la nube y los principales aspectos a tener en cuenta antes de tomar la decisión de la migración a la nube.

Finalmente, os hablaremos de nuestro tema favorito, la monitorización en la nube, la cual muchas veces se deja en manos de los proveedores de la nube sin saber que estos pueden fallar y generarnos un gran trastorno.

Antes de hablar de cloud…

  • Asume que cada persona tiene un concepto particular acerca de la nube, incluidas sus expectativas. Es un contexto extremadamente cambiante.
  • Existen opiniones muy polarizadas acerca de las bondades y las desventajas de la tecnología en la nube. Ignora a los radicales.
  • Evita las simplificaciones: la nube es complicada en su definición y más aún en su implementación.
  • Ten en cuenta siempre el objetivo de negocio por encima de las consideraciones y supuestas ventajas técnicas. La nube es un herramienta más.

Diez mitos sobre La Nube (en mayúsculas)

  1. La nube siempre ahorra dinero.
  2. Tienes que estar en la nube si quieres subirte al carro de los ganadores.
  3. La nube se debería usar para todo.
  4. Lo que dicen todos los CEO’s que saben es que hay que ir a la nube.
  5. Se necesita una única estrategia (fabricante único) a la hora de ir a la nube.
  6. La nube es más insegura que las alternativas on-premise.
  7. La nube no puede ser para servicios críticos.
  8. La nube equivale al Centro de datos.
  9. Migrar a la nube significa que se adoptan todas las mejoras que ofrece esta.
  10. Virtualizar es lo mismo que irse a una nube privada.

Ninguna de estas aseveraciones es necesariamente cierta y muchas de ellas son falsas en la mayoría de los casos, aunque no quita que haya excepciones, por supuesto.

Los cinco errores más habituales a la hora de migrar a Cloud

Olvidarse de la importancia de la conectividad de red entre la nube y otras infraestructuras. No medir la capacidad y hacer una monitorización exhaustiva de SLA de esas conexiones puede conducir a graves problemas de servicio.

Creer que la nube funciona sola. A menudo se contrata infraestructura pero no servicios, que hacen que perdamos el control sobre nuestra operación y que pueden hacer que nuestro servicio final se vea seriamente perjudicado.

No pensar en qué ocurre en caso de desastre. El efecto inesperado de una caída en el servicio de nuestro proveedor, ¿cómo afecta a su operación? ¿Es más grave el impacto en el caso de tener demasiada exposición a la nube? No todo el mundo hace ese ejercicio, considerando todopoderosos a los proveedores de Cloud, sin ser conscientes de que a ellos también se les puede caer la infraestructura (sí, incluso a Amazon).

Asumir que el proveedor es inexpugnable. Si tiene un problema de seguridad es como si fuera una extensión legal de usted y, por tanto, usted también será responsable del problema de seguridad que afecte a sus clientes. ¿Estaba igual de expuesto antes de irse a la nube?

Creer que lo virtual tiene el mismo rendimiento que lo “real”. Ni en acceso a disco, ni en capacidad de CPU, hay situaciones críticas donde necesitará hardware real, y nadie puede ofrecerle eso a precio de cloud (aunque le dirán que sí).

Creer que el cambio no es costoso. Gran parte de los costes reales (TCO) están enterrados en la formación y experiencia que implica migrar a un servicio complejo, compuesto por diferentes elementos que en muchos casos transforman totalmente nuestra operación en algo diferente.

Delegar la monitorización en la propia nube

Mucha gente piensa que al sacar los procesos de su propia infraestructura se va a quitar el problema de mantenerla y, por tanto, de monitorearla, pero se equivoca. Puede que la infraestructura ya no sea un problema, pero el grado de cumplimiento del servicio cobra el mismo valor -si no más- que antes. Un sistema de monitorización que se precie no solo debe ser capaz de decir el grado de cumplimiento, sino que debería seguir siendo capaz de localizar dónde están los problemas.

Esta integración con el negocio ningún sistema se la puede ofrecer “llave en mano”, ya que su negocio solo lo conoce usted; es decir, tendrá que implementar métricas de monitorización dentro de los sistemas gestionados en su cloud.

Herramientas de monitorización propias de la nube

Todos los proveedores de Cloud más relevantes, como Amazon, Microsoft, OpenStack, Google o CloudStack ofrecen, de una forma u otra, sus propios servicios de monitorización, útiles para confirmar que lo que ellos dicen es cierto, pero, ¿lo son para determinar que su negocio funciona como usted necesita?

Dada la diversidad de los orígenes de la información, se necesita una herramienta que se pueda adaptar a las existentes y a las que puedan venir. Muchos fabricantes ofrecen “plugins” para integrarse con determinadas plataformas, pero no es un plan a largo plazo, ya que cada plataforma amplia las API’s e impone sus restricciones y/o condiciones con total libertad. Por ejemplo, si el día de mañana Amazon le pide una cantidad determinada al mes por hacer uso de su API o decide que debe migrar a otra API y su herramienta no dispone de ese conector, quedará ciego.

Por otro lado, la mayoría de fabricantes ofrecen métricas muy cercanas a la infraestructura, EC2, VPC y S3 en AWS, instancias, disco, sitios en Azure, estado de máquinas, imágenes, almacenamiento (OpenSpack, VMware). Estas métricas de infraestructura son las mismas que puede obtener a través de agentes en las máquinas, de forma que no necesita una integración, simplemente seguir operando como lo hacía de forma tradicional.

Entornos híbridos

La mayoría de organizaciones poseen un entorno cada vez mas fragmentado. Tanto en tecnologías como en entornos. Si pretende integrar la monitorización entre su infraestructura privada, cloud privada interna, nube privada en outsourcing, nube privada en hosting, nube pública y SaaS va a necesitar decenas de conectores, años de horas de técnicos, y nunca terminará porque cambiará constantemente. Por esta razón es muy importante no segmentar tanto nuestras infraestructuras y seguir una filosofía “keep it simple”, para facilitar la monitorización de todos los sistemas. En el caso en el que tengamos nuestra infraestructura muy segmentada, entonces os recomendamos seguir la siguiente aproximación.

Monitorización infraestructura vs monitorización de servicio

¿No sería más eficiente monitorizar los servicios que utilizan todas esas infraestructuras? Eso es independiente de la tecnología, y puede ir desde lo más importante (el servicio) a lo específico (los componentes de infraestructura que dan soporte al servicio) de forma que, aunque cambie, lo importante -el servicio- siempre estará cubierto.

A pesar de que Pandora FMS soporta la integración con los principales proveedores de tecnología en cloud o virtualizada (Amazon, Vmware) no recomendamos esta aproximación a nuestros clientes. Nuestras herramientas de monitorización para transacciones sintéticas, combinada con el despliegue de sondas remotas y agentes clásicos nos permite ofrecer una monitorización más adaptada al negocio y menos dependiente de la tecnología que la soporta.

Beneficios de Pandora FMS en entornos híbridos

  • No dependiente de la tecnología de la infraestructura de nube.
  • Orientada a medir el servicio final.
  • Se adapta a los cambios.
  • Ofrece informes específicos del servicio.
  • Más rápido de implementar.

¿Qué te han parecido estos consejos sobre la monitorización de la nube? ¿Tienes alguna duda? No dudes en participar.

Para finalizar, recuerda que Pandora FMS es un software de monitorización flexible, capaz de monitorizar dispositivos, infraestructuras, aplicaciones, servicios y procesos de negocio.

¿Quieres conocer mejor qué es lo que Pandora FMS puede ofrecerte? Descúbrelo entrando aquí: https://pandorafms.com/es

Si cuentas con más de 100 dispositivos para monitorizar puedes contactar con nosotros a través del siguiente formulario: https://pandorafms.com/es/contactar/

Además, recuerda que si tus necesidades de monitorización son más limitadas tienes a tu disposición la versión OpenSource de Pandora FMS. Encuentra más información aquí: https://pandorafms.org/es/

No dudes en enviar tus consultas. ¡El equipo de Pandora FMS estará encantado de atenderte!

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